Librero Independiente
*Cixin Liu hace de la ciencia ficción un asunto de geopolítica
La literatura China está tan lejos de nosotros como la geografía misma del enorme país. Más allá de los lugares comunes y las críticas a su peculiar sistema político, por lo regular provenientes de Occidente, no se puede negar la tradición cultural ancestral de China; sin embargo, poco sabemos del desarrollo de su literatura actual.
El escritor Cixin Liu es uno de los autores de ciencia ficción de la República Popular China más populares actualmente. Con la trilogía Tres Cuerpos, ha trascendido el territorio de su país y conseguido penetrar en las listas de los más vendidos de varias partes del mundo.
El problema de los tres cuerpos, es el primero de la serie y un buen pretexto para adentrarse en la literatura de este autor. La trama es por demás inquietante: primero hace una visita a los absurdos de la llamada Revolución Cultural de 1966, donde uno de los sectores más lastimados fueron los intelectuales y científicos, quienes fueron encarcelados, incluso asesinados por defender teorías contrarias al régimen comunista.
En este ambiente adverso, Ye Wenjie, astrofísica, es confinada a una instalación secreta del ejército, donde se trabaja en un proyecto para crear herramientas y defenderse de los enemigos del régimen. Luego de años en Costa Roja, condenada a no salir jamás de sus paredes, la científica parece ser la única que puede poner en funcionamiento un sofisticado sistema de defensa.
Pero la revisión al pasado que plantea Liu al principio de la novela, es un trampolín para acercarnos a un delirante presente, un thriller que se centra en Wang Maio, un investigador de nanomateriales, a quien las autoridades chinas le piden que se infiltre en un misterioso grupo, que se sospecha está detrás del suicidio de varios científicos.
Wang cae en un estrés despiadado, al descubrir que su investigación provoca que su vida esté marcada con un reloj que supuestamente indica su propia muerte. A la par descubre que un juego de video, Three Body, en el que la tierra es extrañamente alterada por las estaciones, que sufren inestabilidades, donde el sol desaparece o se acerca demasiado a nuestro planeta, hasta provocar su desaparición.
La verdad es que el juego virtual y el grupo secreto de científicos esconden un mensaje extraterrestre, en el que buscan que los trisolarianos vengan a la tierra a redimir a la humanidad a la fuerza, en lo que sería en primer contacto entre humanos y alienígenas.
La visión de Cixin Liu acerca de la tecnología y la ciencia con motivaciones ajenas al bienestar de la humanidad, incluso utilizadas para devastar al planeta, sirve para plantear severas críticas a políticas públicas tanto de su país como de los más desarrollados del mundo.
Antes de convertirse en escritor, Liu, ingeniero de profesión, trabajó en una central eléctrica de Yangquan, provincia de Shanxi, en China, que luego fue cerrada acusada de contaminar la atmósfera.
Desde su aparición, El problema de los tres cuerpos (Ediciones B), se convirtió en texto de culto para los aficionados a la ciencia ficción. Pero a partir de ganarse adeptos como Barack Obama y Mark Zuckerberg, los mercados internacionales voltearon a ver a este autor chino, que vende en su país más de un millón de ejemplares de sus obras, y hoy una de las sensaciones literarias contemporáneas.
@oscardavalos