Desde que comenzó el campo de entrenamiento, los Dallas Cowboys firmaron al cornerback Trevon Diggs, al safety Malik Hooker y al tackle derecho Terence Steele para extensiones y reelaboraron el contrato del guardia derecho Zack Martin, mientras trabajan en los nuevos acuerdos con el quarterback Dak Prescott y el receptor abierto CeeDee Lamb, ambos con contrato hasta 2024.
Prescott contará con $59,4 millones contra el tope salarial el próximo año, por lo que su salida, aunque remota, es posible, por lo que el dueño de los Cowboys, Jerry Jones, quiere tenerlo por mucho tiempo.
“Convives constantemente con ese tipo de números, especialmente los grandes. Eso siempre está en tu mente”, dijo el propietario y gerente general de la franquicia.
“Nunca hay un momento en el que desaparece porque tienes que hacer que todo encaje. Y por eso, está en la mente de la decisión de un jugador a mitad de año. Es simplemente fundamental. Esperamos que Dak esté con Nosotros llevamos mucho tiempo. Y sí, siempre estaremos trabajando en ello con varias maquinaciones de números que funcionarían”, siguió.
Jones ha expresado continuamente el deseo de firmar a Prescott con una extensión, pero completar una en realidad consumiría espacio en el tope salarial este año. En 2024, Prescott está programado para ganar $29 millones en salario y tiene un bono de plantilla de $5 millones.
Los Cowboys le pusieron a Lamb la opción de quinto año para 2024 a un costo de $17.99 millones, pero han tenido conversaciones esta temporada baja con su agente sobre una extensión que lo convertiría en uno de los receptores mejor pagados de la NFL.
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