En la Casa Blanca
El presidente Biden ya la está pensando, eso de quitar el Título 42 sería el último clavo para el ataúd demócrata, así que al parecer va para atrás lo que provocaría a los progresistas de su partido que pujan por fronteras abiertas. Mientras, un grupo de legisladores republicanos se dirige a la frontera entre Estados Unidos y México a fin de “reportar” a la nación el apocalipsis migratorio a punto de invadir su país y de destruir el “american way of life”.
Ante la cascada de críticas tanto en redes como por parte de los republicanos, que le arrojan

terribles estadísticas sobre la inevitable invasión de una horda de “personas que cruzan la frontera y migrantes ilegales”, Biden considera dar marcha atrás a sus planes de eliminar el Título 42, una medida que colocó al Centro de Control y Prevención de Enfermedades de ese país, como un control fronterizo adicional a los ya existentes.
De acuerdo al portal Axios, el círculo íntimo del presidente Biden ha estado analizando el retraso de la derogación del Título 42 que estaría por terminar el próximo 23 de mayo. Con esta decisión, trata de ganar tiempo para evitar una afluencia masiva de migrantes que se sumarían a los números fronterizos ya históricos y que colocan a los demócratas en un serio peligro en los estados que podrían influir en el balance del Senado.
La administración se encuentra en un serio problema: por un lado, los demócratas moderados presionan para retrasar la derogación del Título 42, y por otro, atizaría el enojo de los progresistas que pujan por fronteras abiertas. Todo depende de la habilidad de Biden para negociar pues en pocos días ha de reunirse con el Caucus Hispano del Congreso.
El otro frente, según reporta Breitbart, son los dos grupos republicanos que van hacia la frontera sur: uno se dirige a la división entre California y México, y otro va a la línea entre Texas y México. Se espera que estas delegaciones se reúnan con las autoridades fronterizas norteamericanas en la zona, en donde la información “fresca” prenderá aún más los ánimos republicanos.
No hay que olvidar la “ocurrencia” de Greg Abbott, gobernador de Texas quien, desde la semana pasada hasta hoy ha enviado en total 7 autobuses con migrantes a bordo rumbo a Washington D.C., su destino, dice el gobernador “son las escaleras del Capitolio”. Jen Psaki, vocera de la Casa Blanca afirmó que eran migrantes ya procesados por CBP por lo que eran libres de viajar y que agradecía “que Texas les ayudara a llegar a su destino final”.
Mientras se toma la decisión de terminar o retrasar el Título 42, las autoridades migratorias predicen un “evento de migración masiva” de más de 170 mil migrantes. Las detenciones fronterizas en el mes de marzo del presente subieron a 221 mil, el nivel más alto desde el año 2000.