En la Casa Blanca
Texas acusa que Biden abrió las compuertas a la inmigración ilegal
En los hechos, ya no hay agenda bilateral, sólo hay órdenes. Bastó con las duras y lentas revisiones de tráileres en la frontera norte con Texas y que se desperdiciaran millones de dólares en mercancía para que los gobiernos locales de Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila y Chihuahua se pusieran las pilas y actuaran como gendarmes bajo las riendas del texano Greg Abbott; y de paso ayudarle con su campaña para ver si se reelige el gober de la estrella solitaria. Y todo gratis…for free.
Tras la amenaza a México de que, si no se “aplica” para hacerse responsable de frenar la oleada de migrantes ilegales, el flujo de
drogas y detener la horda de maleantes que intentan entrar a Texas, el gobierno de ese estado amenazó con las inspecciones de nuevo. A los pocos días de este incidente, los gobernadores de los estados fronterizos mexicanos hablaron directo con Abbott; el resultado: los cuatro “maravillosos” gobers forman ya parte del “task force” en la frontera.
El martes 26 de abril, el gobernador de Tamaulipas Cabeza de Vaca andaba feliz a caballo con la policía fronteriza de Texas “inspeccionando” los alrededores de la línea fronteriza. Ningún funcionario mexicano lo acompañaba, él solito andaba feliz haciendo la revisión de rutina con los guardias texanos, nomás le faltó el látigo.
“Nuestra frontera está en crisis” se queja Abbott, dice que está construyendo el muro fronterizo y que además han desplegado unos 10 mil soldados de la Guardia Nacional de Texas en la frontera, gracias a esto han sido rechazados 15 mil migrantes que intentaron pasar ilegalmente. Por eso “me senté con (los) gobernadores (mexicanos) y firmé acuerdos que establecen lo que pueden hacer para enfrentar estas circunstancias únicas”. Entre los compromisos adquiridos dice Abbott que los estados mexicanos aumentarán la seguridad en sus puertos de entrada a Estados Unidos y a lo largo del Río Bravo, en particular en los cruces de aguas bajas donde pasa la migración ilegal, las drogas y la actividad de los carteles.
En Chihuahua, la gobernadora Campos despliega la Plataforma Centinela, un paquete tecnológico que permite a la policía estatal rastrear vehículos desde que salen del parque industrial en Juárez hasta cruzar la frontera con Texas, esto para evitar el contrabando. También utilizan drones y filtros biométricos para ayudar en la captura de los líderes del cartel.
El gobernador de Coahuila colocará puestos de control en todo su territorio para interceptar las caravanas antes de que lleguen a la frontera; también desplegará vehículos todoterreno y helicópteros para bloquear a ilegales en puertos clave y a lo largo del Río Bravo.
En Tamaulipas, Cabeza de Vaca se comprometió a operar puestos de control en todo su estado para ubicar migrantes y devolverlos a migración en México; también se desplegarán equipos tácticos en Nuevo Laredo, Miguel Alemán, Camargo, Reynosa, Nuevo Progreso, Matamoros y en cruces de aguas bajas en el Río Bravo. Utilizará su equipo C5 en Reynosa para vigilar los cruces y compartir información con autoridades de Texas. A sus órdenes jefe!!!
“Cada uno se comprometió conmigo a trabajar contra los carteles mexicanos, contra las drogas, armas y migrantes ilegales. No piensen que son solo migrantes inocentes…(hay) pandilleros, asesinos de policías, violadores e incluso terroristas. Y vienen de más de 150 países del mundo!!!” Pobre Abbott, el abrumado.