José Vilchis Guerrero
Cancelar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en Texcoco y construir el Aeropuerto Internacional “Felipe Ángeles” (AIFA) generaron un gasto superior a 400 mil millones de pesos, afirmó la senadora panista Kenia López Rabadán.
Al criticar de ineficiente al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, López Rabadán sostuvo que están pendientes de pagar 90 mil 630 millones de pesos por lo bonos colocados para construir el cancelado NAIM, que deben cubrirse en los próximos 20 años, problema que debe resolver la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Aunque omitió la información oficial de que el gobierno federal pagó 100 mil millones de pesos al cancelar el NAIM e invirtió 74 mil 500 en la construcción del AIFA, al que calificó de elefante blanco, dijo que esta inversión continuará siendo una carga económica para los mexicanos.
Sin mencionar sus fuentes de información, agregó que, según la explicación de los miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), el costo de la obra ejercido para su construcción asciende a 74 mil 500 millones de pesos, aún faltan por ejercer alrededor de 4 mil mdp.
Refirió que evidentemente existen muchos cuestionamientos en cuanto a su operatividad y su viabilidad financiera, pues su punto de equilibrio se alcanzará cuando tenga 5 millones de usuarios, “lo que, en el corto plazo, no se ve posible”.
Informó la legisladora panista que luego del recorrido que realizó el domingo tras recibir una invitación formal para asistir al AIFA, a través de una carta firmada por el titular de la SEDENA, Luis Crescencio Sandoval González, pudo evidenciarse que es una obra que marcará a este gobierno.
“Las deficiencias de este aeropuerto no están en la construcción que corrió a cargo de la SEDENA. El problema claramente está en la falta de planeación, la falta de conectividad, en la falta de pasajeros y en la falta de aerolíneas que quieran realizar vuelos desde ahí”, subrayó.
Explicó que el recorrido de una duración de 5 horas, incluida la Torre de Control, los controladores de vuelo de los Servicios de Navegación en el Espacio Aéreo Mexicano le explicaron el equipamiento con el que cuentan.
Comentó López Rabadán que entregó 20 preguntas a los expertos y responsables del AIFA, mismas que le hicieron llegar diversos sectores de la sociedad y que espera le respondan puntualmente. Sin reconocer –o ignorar- que un aeropuerto nuevo no tiene suficientes usuarios ni operaciones aéreas desde el principio, concluyó: “Qué bueno que tienen el mejor equipo de México, pero sin tráfico aéreo, de poco sirve”.