Dejémonos de tonterías: la elección del Estado de México siempre estuvo perdida para el PRI. Aunque hizo una campaña bastante digna, Alejandra del Moral requería de un milagro para hacerse de la gubernatura de su estado, y cualquier otro resultado que no le favoreciese a la puntera de las encuestas, Delfina Gómez, levantaría un enorme tufo a fraude electoral. La verdadera sorpresa sería que Morena ganara Coahuila, pero lo demás ya estaba firmado.
A minutos del cierre de casillas en el Estado de México, y mientras escribo esta columna, tanto el PRI como Morena proclamaron sus triunfos en la entidad. Alejandra del Moral, acompañada por su dirigente nacional, Alito Moreno, el panista Marko Cortés y el perredista Jesús Zambrano, los tres con cara de funeral, dijo haber ganado la elección pero no pudo ofrecer mayores precisiones, ni responder preguntas de la prensa. Solo atinó a comentar que esperará hasta que se cuenten todos los votos. Por su parte, el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado, dijo que su candidata, la maestra Delfina Gómez, se llevó la elección por entre 15 y 17 puntos. Fueron 58 días de campaña que no modificaron las preferencias de los mexiquenses, y si las tendencias no dan un giro inesperado durante la madrugada de este lunes, será la morenista Delfina Gómez quien se convertirá en la primera gobernadora del Estado de México. No es cualquier cosa, y mucho menos tratándose de un estado que siempre había sido gobernado por el PRI (y donde el Grupo Atlacomulco parecía invencible). Por eso la primera en capitalizar el triunfo de la texcocana será Claudia Sheinbaum.
En Coahuila tampoco hubo sorpresas. Después de una tendencia desfavorable en las encuestas de salida y del PREP, Armando Guadiana aceptó su derrota pese a que aún no se ha terminado el conteo de los votos. El aspirante morenista salió la misma noche del domingo a una conferencia de prensa acompañado por el presidente de su partido en el estado, Diego del Bosque, diputadas y diputados federales de Aguascalientes, Zacatecas y Nuevo León, para agradecer el apoyo de su equipo y de todos quienes lo acompañaron durante todo el proceso. Y de paso, Guadiana culpó directamente al ex subsecretario de Seguridad, Mejia Berdeja por la aplastante derrota: “Parte de eso sucedió y nos afectó por la división que hubo en la izquierda, todo tiene nombre y apellido, se llama Ricardo Mejía, a un traidor, va a sacar muchos votos y propiciando que Morena perdiera”, acusó. Por su parte, el candidato priísta de “Va por México”, Manolo Jiménez Salinas, se autoproclamó ganador con una amplia ventaja frente a sus rivales.
Vale la pena decir que la jornada electoral de este domingo finalizó sin incidentes delictivos ni asesinatos de candidatos o violencia contra actores políticos. Desde luego no estoy diciendo que fue una jornada perfecta, sin embargo, comparado con otros procesos, creo que lo vivido durante el domingo, tanto en Coahuila como en el Edomex, es de reconocerse.
PD: Descanse en paz el gran periodista Ricardo Rocha. Un abrazo a todos sus seres queridos.
@CallodeHacha
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