Supongo que, al candidato a la gubernatura de NL, el Licenciado Samuel García, ya se le salió de las manos el gobernador del mismo nombre.
Ahora resulta que sobre el pleito cazado que traen entre congreso, alcaldes y gobernador y que cada día sube más de tono en el tema de las nuevas líneas del metro, y habiendo tantas opciones para solucionar las diferencias, es una pena leer la siguiente declaración del gobernador:
“El Gobernador asegura que, si los alcaldes del PRI y el PAN no dan los permisos para la construcción de la Línea 6, aplicará expropiaciones”. Fuente: El Norte.
Y recalco que es una pena, porque todo se podría y debería solucionar con diálogo. Diálogo entre las partes. Haciendo mesas de trabajo con los vecinos y los alcaldes inmiscuidos, porque finalmente está en juego el patrimonio de mucha gente y aunque el bien común esté por encima de todo, el patrimonio de las personas también se debe priorizar, y en vez de que Samuel se siente a dialogar con vecinos y alcaldes, a buscar el cómo sí, lamentablemente se va por el camino del autoritarismo y de la total falta de empatía y respeto para las demás partes a las que está no sólo ignorando si no amenazando con expropiar.
Además, viniendo la palabra expropiar de voz de un abogado y doctor en derecho solamente nos dice que está pensando con el estómago, porque por más que expropie propiedad privada, los permisos todavía los tiene que autorizar y dar el municipio por donde pasen la línea de Metro.
Pero si expropia, es importante que la gente no se olvide de quién le arrebató su patrimonio. O se lo destruyó con decisiones equivocadas.
Se les va el piso de inmediato y se les olvida que su puesto es provisional y creen que van a estar en el poder eternamente.
Y el tiempo vuela y dentro de poco será un exgobernador más y va a terminar convertido en exactamente lo que juró destruir.
Se va a convertir en un nuevo Rodrigo Medina que por más dinero que tenga o haya robado, prácticamente vive a salto de mata.
Y lo más triste de todo es la oportunidad que se pierden de realmente servir al Estado y a las personas, pero más triste todavía, será, que igual que Medina, García tendrá que salir por la puerta de atrás, habiendo tenido todo para salir en hombros.
Y mientras tanto otra de las promesas de campaña y que incluso en un auto llamado “acto simbólico”, Samuel García clausuró la refinería de Pemex, y ahora qué es gobernador y que si podría influenciar, no para que la cierren porque finalmente da miles de empleos, pero sí conseguir el recurso para comprar filtros de alta tecnología y reducir la extraordinaria contaminación que genera.
Pero el tiempo pasa, ya van para dos años de gobierno y lo único que se le reconoce tanto al gobernador, como al congreso y a los alcaldes son los pleitos y pugnas personales. No sé si alguna vez en los cuatro años de gobierno que quedan alguien tomará cordura y se sentarán a dialogar, ¿O de plano así se van a ir los seis años?
Y podemos seguir con las promesas de campaña abandonadas, pero la peor de todas y la más cruel es tener a las escuelas de Nuevo León en ruinas.
Y los neoloneses nos preguntamos, ¿Y las escuelas cuándo?
¿Y el transporte público, cuando?
¿Y la disminución en asesinatos y extorsiones, cuando?
¿Cuándo pondrá en su mira el tener los planteles educativos públicos para que cada alumno tenga en su aula todas las comodidades de un colegio privado?
Justo como se lo merecen todos los niños de México.
¿Cuándo va a priorizar las necesidades actuales de la ciudad, y dejar a un lado tanto sueño guajiro y ansias de poder?
Samuel, solamente te quedan cuatro años de gobierno y primeramente Dios, muchos años de vida y salud. ¿Vas a poder cargar por el resto de tus días con el remordimiento de no haber resuelto los feminicidios del estado que te encomendamos?
La mayoría pasa a la historia como corruptos o ineptos, tú, y ojalá me equivoque, vas a acabar repudiado por ser encubridor y, por lo tanto, cómplice de asesinos de mujeres.
Lamento mucho escribir esto sobre un joven al que le tuvimos la confianza y le dimos la oportunidad de ser mejor que la vieja política y lamentablemente resultó igual o peor.
Y también es triste ver a tanto empresario, incluso industriales, y por supuesto gente común como tú y como yo, aplaudiendo y solapando un gobierno que está destruyendo un estado tan digno como Nuevo León.
@ElPatoZambrano
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