Algo más le hace falta que reunirse con los empresarios “cupuleros” y prometerles que si gana “no va a satanizar a la iniciativa privada”; que cumplirá la ley para atraer inversiones extranjeras…
Algo más que bolearse los huaraches y contar algunos pasajes de su infancia –como cuando vendía gelatinas– y declarar que su papá era alcohólico y golpeaba a su mamá, necesita la señora X para motivar a quienes están hartos de la 4T y voten por el cambio en 2024.
Algo más requiere que seguir gritando a los cuatro vientos que está a punto de rebasar por la izquierda a Claudia Sheinbaum, y que va a ganar la Presidencia de la República, pues su cruel realidad es que las encuestas no justifican el increíble optimismo de la señora del PRIANPRD.
Algo más le hace falta que reunirse con los empresarios “cupuleros” y prometerles que si gana “no va a satanizar a la iniciativa privada”; que cumplirá la ley para atraer inversiones extranjeras; que su estrategia para combatir al crimen organizado y desorganizado no estará basada en abrazos.
Mal haría la señora en creerse los aplausos, los elogios, las palabras bonitas… y las promesas de apoyo de la clase empresarial, pues ellos siempre van a lo seguro. Y seguro, seguro que sólo le endulzan el oído.
REUNIÓN CON EMPRESARIOS
¿Por cierto, los trescientos empresarios con quienes se reunió en el Club de Industriales le prometieron que van a apoyar su campaña con una buena cantidad de billetes, como lo hicieron con anteriores candidatos a la presidencia de la república?
Pues estarían locos para hacer algo así, porque si se entera ya saben quién es probable que les quite algunos contratitos, apuntan los suspicaces.
Lo que la señora X requiere con urgencia es que alguien llegue en su auxilio y le de oxígeno a una precampaña que se asfixia, porque está muy claro que su equipo está integrado por una bola de inútiles, que no tienen estrategia, ni discurso, ni idea de lo que es una campaña política, y que no saben cómo reanimar a su desfallecida candidata.
Los dirigentes del PRI, PAN y PRD que le prometieron ayudarla para que siguiera creciendo políticamente y se consolidara como una fuerte competidora, no saben qué hacer.
¿Y Santiago Creel, quien supuestamente es su coordinador que está haciendo? Preguntan los ingenuos. ¡Pues seguramente está tirado en la hamaca!, piensan sus detractores.
¡No se hagan bolas!
Podría decirles ya saben quién.
Lo que la señora necesita es una “operación salvamento”; no puede seguir cavando su propia tumba con sus ocurrencias, anécdotas, chistoretes, errores, tropezones (como reconocer el plagio de algunos párrafos de su tesis) porque si sigue por ese camino va a llegar a las inscripciones de la competencia prácticamente desahuciada, y cuando empiece la campaña la sociedad podría decepcionarse, apuntan los observadores.
La interrogante es: ¿Quién o quiénes podrían instrumentar la operación salvamento?
AGENDA PREVIA
Y mientras la señora X sigue dando tumbos, Claudia Sheinbaum acude al Senado de la República, en donde promete que si los legisladores la apoyan serán recompensados, ya sea con una reelección o con algún cargo en su administración. ¡Ah bárbara!
No olvides mantenerte informado en El Independiente MX