En su momento el INAI ocultó los gastos personales de Guerra Ford, quien presuntamente utilizó una tarjeta corporativa de la institución para consumir en un “table dance” de nombre “Curazao”, al menos tres veces en el año 2016
El sueño de todo político mexicano lo hicieron realidad los funcionarios del Instituto Nacional de Acceso a la Información, mejor conocido por el presidente Peña Nieto como el “Instituto de Información y de Acceso de Información a la Opinión Pública de Toda la Información Disponible”.
Resulta que, en 2016, Oscar Guerra Ford, ex comisionado del INAI no se aguantó las ganas y usó una tarjeta del organismo para pagar un “table dance”. Cabe decir que actualmente es secretario ejecutivo del Sistema Nacional de Transparencia, cargo al que acaba de renunciar debido a estas investigaciones.
Otro de los cochinotes es Rosendoevgueni Monterrey Chepov, quien también renunció a su cargo en esa institución, bajo el argumento de facilitar con eso las indagatorias del caso.
“El INAI actuará con todos los recursos administrativos y de fiscalización disponibles“, señaló el pleno del INAI en un comunicado. Pero resulta que el Instituto sabía de esto desde hace 8 años y ocultó la información. Déjeme se lo repito: El instituto encargado de la transparencia ocultó que sus funcionarios cargaban prostitutas al erario. Parece chiste, pero es una anécdota.
En el momento el INAI ocultó los gastos personales de Guerra Ford, quien presuntamente utilizó una tarjeta corporativa de la institución para consumir en un “table dance” de nombre “Curazao”, al menos tres veces en el año 2016. Aparte de cochinos, golosos.
Por si fuera poco, cabe decir que este lugar fue clausurado en 2018 por prostitución y trata de personas. El INAI aclaró que sus funcionarios actuales no estaban presentes en el organismo cuando sucedió, ya que quienes sí estaban no separaron al funcionario de su cargo. La información salió a la luz por un recurso de revisión promovido por un particular, aunque quedaron otros 94 cargos que el organismo ocultó por supuestamente revelar el patrimonio de Guerra Ford.
Y como su pecho no es bodega, el presidente López Obrador fue cuestionado sobre el tema. Recordó que precisamente por eso no está de acuerdo con que existan organismos como el INAI, que cuestan al pueblo para mantener sueldos millonarios y lujos de los funcionarios, además de que suelen darse casos como este.
Sin embargo, como era de esperarse, la reacción de la oposición fue patética, y en lugar de condenar el hecho, acusaron a AMLO de coordinar una vendetta personal en contra del instituto por revelar corrupción de su gobierno. Hágame usted el favor, o sea que como represalia a que el INAI hizo público el caso de Segalmex, AMLO viajó en el tiempo al 2016 y obligó a funcionarios del INAI a pagar prostitutas con cargo al erario.
Si le hace sentir mejor, los funcionarios investigados han dejado sus puestos (8 años después) y hasta AMLO aplaudió la salida de ambos secretarios: “Eso es bueno, antes no se podía tocar al intocable”, señaló el mandatario en su conferencia de prensa. Sin embargo, el daño está hecho y tal vez todos podamos aprender una importante lección: nunca pagar “privados” con dinero público. Nos leemos el martes.
No olvides mantenerte informado en El Independiente MX
