“Hace falta muy poco para tener una vida feliz; está todo dentro de ti,
en tu forma de pensar”
Marco Aurelio
Marco Aurelio solía invertir valiosísimo tiempo escribiendo en sus diarios. Escribía como un mecanismo para ser mejor. Epicteto, otro gran estoico, recomendaba escribir diariamente para verter nuestras ideas y reflexionar sobre ellas. Así Marco Aurelio, quien escribía para sí mismo, nos transmitió una serie de ideas y postulados extraordinarios a través de su obra Meditaciones, misma que nunca pensó hacer pública, pero que ha trascendido de manera relevante.
¿Escribes? ¿Llevas un diario? Especialistas recomiendan hacerlo. Quienes tienen el hábito de escribir diariamente sostienen la misma recomendación. Ryan Holiday sostiene que un diario es un espacio para aclarar nuestras ideas, encontrar paz, calmar la energía negativa y hacer frente al estrés y la presión.
Tal vez pienses que no eres escritor y que no tienes de qué escribir. Sin embargo, la realidad nos muestra que prácticamente todos, en mayor o menor medida, podemos dar salida a nuestros pensamientos a través de la tinta y el papel. Usualmente solemos asociar la escritura de un diario con la juventud y las emociones propias de la etapa, no obstante, sus beneficios están disponibles para todos, independientemente de condiciones específicas como pudiera serlo la edad o el sexo.
La disciplina de escribir o recopilar -ya sea en video o audio- un diario, es una muy buena manera de mejorar nuestros procesos mentales y con ello nuestra salud mental. Hacerlo, además permite capturar nuestras experiencias y vivencias auxiliando a nuestra memoria. Escribir un diario promueve la convivencia con uno mismo y la reflexión profunda. Es una forma de detenernos, de provocar una pausa en un mundo que se mueve a gran velocidad, para así reflexionar acerca de lo que vivimos.
Contar con el hábito de escribir nos invita a valorar las experiencias por las que transitamos, además de provocar el contacto con nuestras ideas, que a su vez generan emociones y pensamientos, disminuyendo así nuestros niveles de ansiedad y estrés. Permite aclarar la mente, creando la oportunidad de dejar atrás aquello que nos pesa y liberar de obstáculos nuestra visión futura otorgándonos claridad.
El diario suele ser ese depósito donde es posible colocar aquello que nos provoca tristeza o ira, auxiliándonos en el proceso de controlar nuestras reacciones provocadas por los pensamientos que albergan nuestra mente.
Destinar tiempo para este proceso te faculta para manejar con mayor claridad tus ideas y pensamientos, facilitando el proceso comunicativo con quienes te rodean, mejorando tu capacidad para elegir qué quieres compartir y qué no acerca de aquello que piensas y vives. Escribir un diario como lo hacían los estoicos permite ser más conscientes de lo que nos pasa y lo que ello provoca en nosotros. Es decir, escribir permite seguir el hilo de nuestras emociones y encontrar su raíz.
Escribir diariamente te traerá grandes beneficios. Será una de las herramientas más valiosas para detonar tu crecimiento personal. El momento más importante para comenzar con la construcción de un hábito es ahora. Empezar permitirá experimentar y practicar, lo que con disciplina y constancia, abonará a construir la mejor versión de nosotros mismos.
Escoge un formato, un tiempo y un espacio. Escribe sin juzgarte. No te limites u obligues, solo hazlo. Cuando lo creas oportuno, vuelve a lo que has escrito. Te invito a intentarlo, no te arrepentirás.