La violencia en el segundo fin de semana largo dejó al menos 17 muertos en seis municipios del estado, la mayoría en este puerto turístico.
El viernes, seis personas fueron asesinadas en una emboscada en Metlatónoc y un músico fue ultimado en
Malinaltepec, ambos municipios de la región de La Montaña.
Ese mismo día, un cuerpo embolsado fue hallado en el Viaducto Diamante de Acapulco, otro en descomposición en Coyuca de Benítez y en Iguala madre e hijo fueron acribillados.
El domingo 20, asesinaron a un motociclista, dejaron dos cadáveres entambados y otro más en un taxi en hechos distintos en Acapulco. Además, se alertó de un taxi quemado.
Finalmente, el pasado lunes, dos individuos fueron acribillados en Atenango del Río.
Guerrero mantiene violencia
Según un informe publicado por la organización The International Crisis Group, al menos 40 grupos luchan por un
diverso portafolio criminal, que incluyen actividades como producción y tráfico de drogas, así como extorsión y secuestro en el estado.
Incluso, tal contexto impulsó la aparición de grupos denominados como “autodefensas” para mitigar la impunidad que se vive en la entidad. Sin embargo, el resultado en ocasiones es más violencia.
El pasado miércoles 26 de enero, pobladores de Buenavista de Salud, en Chilpancingo, Guerrero, fueron testigos de un enfrentamiento entre supuestos integrantes del grupo Los Ardillos e integrantes del campamento de la Unión de Pueblos Organizados del Estado de Guerrero (UPOEG), con un saldo de siete personas muertas.