Momentos de angustia e incertidumbre se vivieron en las inmediaciones de establecimientos ubicados en la colonia Roma Norte de la alcaldía Cuauhtémoc, debido a una serie de detonaciones de arma de fuego. Las balas provocaron que los comensales de un restaurante se refugiaran debajo de las mesas mientras esperaban la llegada de las autoridades de la Ciudad de México.
Aunque los hechos se registraron en la tarde del sábado 20 de mayo, no fue sino hasta ayer lunes que la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SCC) dio a conocer cómo se suscitaron los disparos, mismos que se originaron cerca de un hotel ubicado en la avenida Álvaro Obregón en su cruce con la calle Morelia.
Los policías capitalinos tuvieron conocimiento de lo ocurrido mediante una alerta emitida por frecuencia de radio, por lo que se trasladaron a dicho lugar para corroborar lo sucedido. De manera preliminar se informó que los balazos provenían cerca del hotel Stanza, lo que generó el desalojo momentáneo del inmueble.
Sin embargo, los disparos también fueron percibidos en los establecimientos que se ubican al exterior del hotel, como en el restaurante La Docena, donde los comensales tuvieron que buscar un lugar seguro para protegerse, pues desconocían lo que pasaba en los alrededores.
En el video compartido en redes sociales se puede ver a un grupo de jóvenes que se resguardó debajo de las mesas del restaurante en el que se encontraban para evitar que fueran alcanzados por las balas. Si bien de fondo se escuchaba música y algunas conversaciones, el resto de los comensales también tuvieron que echarse pecho tierra.
Los momentos de incertidumbre y angustia duraron un par de minutos, tiempo durante el cual la mayoría de las personas permanecieron agachadas. Posteriormente una a una se fue levantando para ver si los disparos ocurridos en el exterior habían cesado. Para ese momento ya habían arribado los elementos de la SSC.
De acuerdo con los informes oficiales, cuando las autoridades llegaron al lugar del incidente un ciudadano estadounidense les indició que un sujeto desconocido lo había amagado con una pistola y lo despojó en un reloj de alta gama. En respuesta, otras personas que se identificaron como escoltas activaron sus armas de fuego al percatarse del asalto.
Fue así como se originaron los disparos y se realizó un recorrido en la zona para ubicar al responsable de lo ocurrido. A la altura de la calle Frontera, los uniformados lograron detener a un individuo que coincidía con la descripción física y de vestimenta que fue descrita por el estadounidense. No obstante, el afectado no lo reconoció plenamente, por lo que no tuvo que ser presentado ante las autoridades ministeriales y fue dejado en libertad.
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